La democracia después del comunismo

En 1789 se prendió la mecha de la Revolución francesa. Por una extraña coincidencia, en 1989 vuelve a prenderse otra que cierra esta vez el ciclo revolucionario iniciado en París dos siglos antes. El comunismo cayó en 1989 en Europa del Este y se disolvió también en Moscú en 1991. Concebida como un complemento a su Teoría de la democracia (AU 566, 567) esta nueva obra de GIOVANNI SARTORI constituye un replanteamiento en el que se analizan los problemas que se cierran y, al tiempo, se abren con el fin del comunismo. ¿Cómo se refleja la caída de estos regímenes y de su ideología sobre la teoría de la democracia? El ocaso de la ideología marxista no modifica la teoría anterior al marxismo, que resistió a su ataque. La teoría liberal-democrática vuelve a encontrar en los acontecimientos de 1989-91 su mejor confirmación. La disolución del comunismo nos deja frente a un vencedor absoluto: la democracia liberal. En el mundo modernizado, quien gobierna sin democracia carece de legitimidad, pero incluso el juego democrático puede jugarse mal. ¿Sabrá resistirse la democracia a sí misma? La teoría de la democracia no tiene por qué ser reinventada, pero, sin embargo, debe reconvertirse y es a esa tarea a la que se dedica G. Sartori en LA DEMOCRACIA DESPUES DEL COMUNISMO.